Cayeron por un robo y tenían el celular de un joven asesinado Lomas de Zamora

Son dos hermanos que asaltaron una distribuidora. El teléfono los vinculó al crimen de Matías Terrón, cometido hace 15 días.



Dos hermanos fueron detenidos luego de asaltar una distribuidora de gaseosas, en Lomas de Zamora. Tenían encima dinero, armas y dos celulares. Horas después del operativo, un dato puso en alerta a los investigadores: la División Cibercrimen de la Bonaerense analizó los celulares de los ladrones y descubrió que uno de ellos pertenecía a Matías Terrón (31), asesinado el 23 de junio durante un asalto.

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Al confirmar que se trataba del teléfono de la víctima, la Policía allanó la casa de los sospechosos, en Lomas de Zamora. Allí encontraron dos televisores LED, un reloj Tommy Hilfiger, tres cámaras de foto, una notebook, dos trozos metálicos de los denominados “yugas”, cuatro tablets, cinco celulares de alta gama y cuatro teléfonos Nextel.

Todos los objetos serían robados. Como parte del operativo también fueron detenidos un hombre y una mujer, ambos acusados de encubrimiento.

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Según informaron fuentes del caso, los sospechosos tienen 26 y 31 años. El miércoles a la tarde asaltaron un comercio ubicado en Sáenz al 1300 y escaparon en un Chevrolet Corsa.

Los detuvieron en Colombres y Garona, tras una corta persecución. Según informaron a Clarín fuentes del caso, ambos quedaron acusados por homicidio.

Los investigadores buscan determinar cómo consiguieron el celular y si estuvieron involucrados directamente con el crimen.

Terrón fue asesinado la noche del 23 de junio. Había ido hasta la casa de una amiga, en Necochea al 1700, Sarandí, a buscar a sus perros. Mientras la esperaba en la calle, fue sorprendido por delincuentes que se lo llevaron en su auto, un Fiat Punto.

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Los ladrones le exigieron a la víctima que los llevara a su casa. El joven –que vivía en la avenida Mitre, al lado de la sede de Independiente– quiso evitar ir hacia allí porque estaba su mujer, embarazada de pocas semanas.

Por eso llevó a los asaltantes a la vieja casa de sus padres, en Luis María Campos al 2900.

Al llegar, Terrón intentó escapar. Estaba maniatado y llegó a correr unos metros, hasta que uno de los asaltantes le disparó por la espalda.

El joven, que tres días antes le había contado a su familia que iba a ser padre, murió desangrado