AFIP CLAUSURÓ TALLERES TEXTILES CLANDESTINOS

Los responsables de los talleres intentaron burlar el control obligando a los empleados a esconderse ante la visita de la AFIP. Los hicieron saltar sobre los techos y ocultarse en terrazas. Los establecimientos clausurados no estaban habilitados para funcionar como talleres textiles.


Se encontraron indicios de reducción a la servidumbre, trata de personas y fraude marcario.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), a través de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social, clausuró cuatro talleres textiles clandestinos -tres localizados en Villa Celina en el conurbano bonaerense y uno en el barrio de Parque Chacabuco en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires-, donde se relevaron 45 empleados no registrados, 15 de ellos extranjeros, sin documentación para trabajar en el país, de los cuales 5 eran indocumentados.

Los agentes de la AFIP constataron que estos establecimientos no estaban habilitados y confeccionaban ropa para las marcas Farenheit, Battaglia Jeans, Dani Sport, Pink Banana y Dibera.

En dos de esos talleres, que hacían camisetas de fútbol, se detectaron maniobras que configurarían el delito de fraude marcario, ya que utilizaban etiquetas de las marcas Nike, Adidas, Puma y Topper, sin probar la autorización que las habilite.

La mayoría de sus trabajadores vivían en los talleres con sus familias, en condiciones precarias de higiene y de seguridad, realizando extensas jornadas laborales, y percibiendo salarios muy por debajo del mínimo del convenio colectivo.

Funcionarios del organismo corroboraron que sus responsables habían escondido al personal no declarado, haciéndolos saltar sobre los techos y hasta ocultándolos en terrazas. Una vez relevados pudieron describir su situación.

La AFIP procedió a la clausura de esos talleres, ya que cuatro de los dueños no estaban inscriptos como empleadores, efectuando la correspondiente denuncia al Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N° 1 de Morón, y al Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 7 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

A partir del operativo, el titular de un taller, al encontrarse bajo fiscalización, procedió a inscribirse como empleador y, además, se excluyó del Régimen Simplificado de Monotributo a una responsable del establecimiento que figuraba inscripta en la categoría más baja (Categoría B) y no como lo exige la ley.

Asimismo, se dio intervención a la Dirección General Impositiva, que procedió a interdictar la mercadería, por carecer de respaldo documental.

Ante estas situaciones de ilegalidad, en función de las normas vigentes, la AFIP también formuló denuncias penales para que se investigue la posible comisión de delitos de reducción a la servidumbre y trata de personas.

Parte de las prendas confeccionadas en los talleres son comercializadas en la Feria “La Salada”, de la Provincia de Buenos Aires, y en la avenida Avellaneda de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El operativo se realizó con el apoyo de Gendarmería Nacional y Policía Federal Argentina.