Liberaron a un joven porque había sido condenado a perpetua cuando era menor

Había sido sentenciado por un homicidio en 2003 por la Segunda Cámara del Crimen de San Rafael, pero la Corte provincial anuló la semana pasada el fallo y ordenó su liberación al considerar que se violó la prohibición de condenar a perpetua a menores.



Un joven de nombre Jonathan fue liberado el martes pasado al mediodía luego de un fallo dictado el día anterior por la Suprema Corte de Justicia de Mendoza que anuló la condena a prisión perpetua por un homicidio que cometió cuando tenía 17 años.

El máximo tribunal consideró que la sentencia de la Segunda Cámara del Crimen de San Rafael dictada el 8 de julio de 2003 viola las disposiciones de la Convención de los Derechos del Niño, incorporada a la Constitución Argentina en 1994, que prohíbe condenar a prisión perpetua a menores de edad.

La revisación de esta sentencia había sido solicitada ante la Corte por la abogada Mariela Herrera, quien explicó que no se cumplió con legislación penal de menores que establece “el dictado de medidas tutelares hasta que se cumpla la mayoría de edad y después recién se le puede fijar una pena. Pero a este pibe lo declararon penalmente responsable, le dieron perpetua y lo mandaron a la cárcel”.

En un comunicado, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de San Rafael recordó que “durante más de una década de cautiverio, al joven se le negó o retaceó asistencia psicológica, psiquiátrica, atención por asistentes sociales, y pocas veces pudo inscribirse en la escuela en contexto de encierro, ya que los funcionarios penitenciarios le manifestaban ‘¿para que querés estudiar, si tenés perpetua?”.

En ese sentido, exigió “al Estado provincial que proporcione urgentemente asistencia psicológica, educativa y un empleo a quien fuera víctima de tanta violencia institucional, para intentar revertir los efectos de más de una década de encierro carcelario sin la debida atención para su recuperación y reintegración social”.

La Corte ya había revocado otras condenas similares siguiendo los lineamientos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que había condenado a Argentina por estas sentencias a prisión perpetua de menores de edad.

En ese fallo el organismo internacional había exigido al Estado Argentino que adecue el sistema penal a los estándares internacionales de derechos humanos y que asegure que no se vuelva a imponer este tipo de penas.