Ayer a la mañana en el Segundo Juzgado de Instrucción se entregó un joven de 24 años que estaba en la mira de los investigadores por el homicidio de Rolando Cordero, el criador de cerdos asesinado en la víspera de Navidad en su vivienda de Cuadro Nacional.
Se trata de un hombre con domicilio en barrio Americasa, situado cerca de Cuadro Nacional, que decidió entregarse ante el juez Pablo Peñasco, a cargo de la causa, ante el cierre del cerco de la policía, que lo tenía identificado y lo estuvo buscando en distintos lugares que se allanaron en los últimos días.
Ahora los esfuerzos de los investigadores están puestos en la búsqueda de un segundo sospechoso de 33 años conocido con los apodos de “Licha” y Pichicha” y que tiene domicilio en el asentamiento inestable de Cuadro Nacional.
Ese lugar fue escenario de unos de los tres allanamientos que efectivos de Investigadores con apoyo de otras áreas policiales concretaron el martes a la mañana.
Los otros dos procedimientos se realizaron en una casa de San Martín al 110, en el barrio de La Ripiera de ciudad, y en el barrio Americasa, donde se secuestraron elementos que pueden servir como pruebas en la causa.
El “Pichicha” o “Licha” es cuñado del joven que se entregó a la Justicia y ambos poseen antecedentes relacionados a estupefacientes y robo de viviendas.
Los subcomisarios Pablo Domínguez, jefe de la Comisaría 62 de Cuadro Nacional, y Sergio Sosa, titular de la Unidad Investigativa San Rafael, explicaron que los dos pudieron ser identificados a partir de distintas medidas de investigación y allanamientos realizados desde la semana pasada y destacaron el aporte de datos de la gente en las mismas dependencias policiales o a través del 911.
Esto permitió ir descartando sospechosos y cerrando el cerco en torno a “dos personas de la zona de Cuadro Nacional que tenían llegada al asentamiento, lo que permitió que uno de ellos se presentara ante el Segundo Juzgado de Instrucción y diera detalles y comunicara que había participado en el hecho del día 24”.
El hecho
Rolando Cordero era un hombre conocido y querido en Cuadro Nacional que se dedicada a la venta de cerdos que criaba en la parte trasera de su vivienda de Sarmiento 1550, donde anteriormente funcionó una granja educativa.
En ese lugar sorprendió a dos hombres que intentaron robarle unos lechones y otros animales, cansado de sufrir robos similares en días anteriores.
Fue apuñalado debajo de la tetilla izquierda con su propio cuchillo de matar chanchos que los homicidas le quitaron cuando habría intentado frustrar el robo, alrededor de las 20 del 24 de diciembre.
Tres llamados al CEO y a la comisaría de Cuadro Nacional avisaron del hecho y al arribar los policías encontraron a Cordero aún con vida y siendo asistido por una sobrina y su marido, ambos médicos, que habían llegado a San Rafael a pasar las fiestas.
Luego llegó una ambulancia del Servicio de Emergencia Coordinado para su traslado, pero el hombre, cuyo corazón fue afectado por la puñalada, entró en un paro cardiorrespiratorio y, pese a los esfuerzos de reanimación, falleció en el lugar.
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