Un medico del Hospital Central fue detenido por personal de Delitos Complejos y de la Policía. Se espera que sea imputado por el fiscal especial Santiago Garay por distribución de pornografía infantil en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante.
Quedó alojado en Contraventores, a la espera de ser indagado por los pesquisas. La Policía allanó en Las Heras la casa del médico sospechado hace unos 20 días y allí econtraron notebooks, celulares, computadoras, en las cuales hay imágenes pornográficas que fueron revisadas y se consideró que eran violatorias del artículos 128 del Código Penal.
Este artículo reprime con una pena de 6 meses a 4 años para el que "ofrece, produce, financia, comercia, publica, divulga y distribuye por cualquier medio toda representación de un menor de 18 años dedicado a actividades sexuales explícitas o toda representación de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales".
De la investigación surge que tenía acopiado pornografía infantil entre la que se encontró una foto donde se ve al médico acusado mientras abusaba de un niño de 2 o 3 años. Personal de Inteligencia hizo una exhaustiva investigación y logró dar con la madre de este menor quien actualmente tiene 10 años.
La mujer reconoció las fotografía del médico con su hijo cuando era pequeño, quien tenía en ese momento 2 o 3 años, y manifestó que ese médico es un familiar. No se descarta en fuentes allegadas a la investigación que el caso de ese niño no sea el único en el cual haya participado ese médico, razón por la que continúa la investigación.
En tanto, el magistrado que está a cargo en Mendoza de la red nacional de lucha contra la pornografía infantil recibió un informe de los EE.UU., con quien colabora permanentemente, de que este profesional podría estar implicado en este tipo de delito.
En Mendoza, según se pudo conocer, se detectaron varias personas que fueron imputadas por este cargo pero en el caso del médico del Hospital Central, de 35 años, su situación procesal es más complicada porque al confiscarle sus computadoras Personal de Delitos Tecnológicos comprobó que estaban cargadas de pornografía infantil.
Así que sus cargos serían doblemente imputables por tenencia de imágenes, pero también por distribución.
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