El incendiuo en un Peugeot 505, propiedad del hijo de la dueña de un secadero ubicado en ruta 144, casi provoca una tragedia cuando las llamas alcanzaron a 3000 pallets que se utilizaban para secar ciruela.
El hecho ocurrió este domingo al mediodía cuando el hombre observó las llamas y en el intento de apagarlo se lesionó levemente y debió abandonar la tarea porque el fuego comenzó a envolver al vehículo hasta que explotó el tanque de gas.
El fuego lejos de apagarse se extendió y afectó unos 3000 pallets de la pequeña empresa y un galpón. El titular del auto, Pedro Sombra, no supo explicar como comenzó el siniestro que por suerte no terminó en una tragedia.
Dos dotaciones de bomberos sofocaron el fuego que provocó daños económicos de consideración. Las primeras pericias determinaron que se trataría de un incendio accidental.
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