Pasado el mediodía se entregó el sospechoso del femicidio ocurrido el domingo (21/04) en la localidad rionegrina de Catriel. El hombre fue identificado extraoficialmente como Cristian Fievet.
Según se informó, familiares de Fievet se presentaron ante el juez de la causa, Santiago Márquez Gauna, y luego lo hizo el propio acusado.
El hecho se produjo entre las 7 y las 8, y según indicaron los vecinos a los investigadores, a esa hora la mujer de 35 años regresaba a su casa de Roma y Perú, del barrio Cuatro Esquinas, donde fue atacada con un arma blanca.
El sospechoso, que vivía cerca de donde se produjo el ataque, era intensamente buscado por efectivos policiales de Río Negro, Neuquén, La Pampa y Mendoza.
La víctima, Cintia Vergara, mamá de dos niños de 9 y 13 años, que habrían estado presentes cuando se inició el ataque, murió a raíz de las múltiples heridas de arma blanca que recibió.
Se presume que cuando comenzaron las agresiones los niños habrían salido de la vivienda en busca de ayuda, ya que cuando arribó al lugar la Policía, alrededor de las 8:30, los chicos estaban cerca de donde se desencadenó el ataque.
De acuerdo con los relatos, poco después de ser agredida la mujer logró salir de su vivienda, con heridas cortantes en el cuello y en las manos. Alcanzó a llegar hasta la casa de sus vecinos, que llamaron a una ambulancia y luego a la Policía.
Sin embargo, y a raíz de la profundidad de las heridas y la gran pérdida de sangre, Cintia falleció camino a la institución de salud.
Sobre el hombre pesaba al menos una denuncia previa por amenazas radicada por Vergara.
Y aunque trascendió que en la vivienda había un botón antipánico, fuentes policiales aseguraron que la casa no contaba con este elemento de seguridad sino con una alarma de las que se utilizan comúnmente para desalentar los robos.
Una vez que se conoció la situación, efectivos de la Unidad 9ª de Catriel y de Criminalística de Cipolletti trabajaron en el lugar para recabar testimonios y pistas que permitan dar con el autor del homicidio.
También estuvo en el lugar el padre de la víctima, quien tuvo que ser contenido por sus amigos ante el doloroso momento que debía atravesar. Luego, siguió de cerca el accionar de los efectivos policiales.
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