En Rosario, un hombre murió en la entrada de su vivienda cuando dos delincuentes a bordo de una moto, se bajaron, lo balearon y huyeron. Se sospecha de una venganza, que tiene que ver con un nuevo capítulo en una serie de asesinatos del barrio Tío Rolo.
Rodolfo Gabriel Frete (32) murió el jueves a la mañana en la puerta de su vivienda en el barrio rosarino Tío Rolo, luego de recibir al menos siete balazos calibre 9 milímetros, propinados por dos personas que iban en una moto. Los investigadores aseguran que se trató de una venganza en el marco de una serie de asesinados registrados desde 2011 en esa zona y en la que siempre se nombran los mismos apellidos.
Según el testimonio de los vecinos, Frete fue atacado en la puerta de su casa mientras tomaba mate por dos hombres que viajaban en una moto Honda Twister negra y roja con los rostros cubiertos por los cascos.
Frete se encontraba en la puerta de su vivienda tomando mates y su familia se encontraba adentro de la casa. De pronto apareció una moto a velocidad regular y al llegar al frente de la víctima y, dándole apenas un segundo para correr, empezaron a dispararle. Con el cuerpo ya tirado en el piso, los delincuentes siguieron disparando.
Según informaron fuentes judiciales, las vainas que se encontraron son de calibre 9 milímetros y de dos armas distintas.
Algunas versiones sobre el móvil del homicidio tienen que ver con que Fretes estuvo ligado con el crimen de Alejandro Sanhueza en 2013, asesinado por dos hombres en una moto, por el que fue detenido y liberado por falta de mérito. El hermano de Sanhueza estaba sospechado de haber asesinado en 2012 a Martín David Almada.
Todos los testigos ocacionales del homicidio de Frete aseguran haber visto al padre de Sanhueza cerca de la casa del hombre y sospechan que fue él quien disparó.
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