El vandalismo parece no tener fin en el hospital Schestakow que este lunes sufrió la pérdida de los dos ascensores que transportan a los pacientes en camilla. Es que un grupo de inadaptados, no se sabe por qué motivo, rompieron a patadas las puertas del quinto piso y dejaron sin ascensores al resto de los pacientes, empleados y visitantes que los utilizan habitualmente.
Esta escalada de violencia sorprendió a las autoridades del nosocomio que desde el lunes a las 18 hasta hoy por la mañana se encontraron con una nueva dificultad. Para resolverla convocaron a los técnicos de una empresa de la capital mendocina que este martes viajaron para arreglarlos.
"No le encuentro explicación a este acto de agresión" señaló a UNO de San Rafael, el director Gonzalo Herrera y agregó que "solo perjudican a los pacientes que no tienen la culpa de nada". El galeno mencionó que "día por medio nos encontramos con algún acto de vandalismo que repercute directamente en el presupuesto del hospital".
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