Lucas Pagliarulo (27) está internado en una sala del tercer piso del hospital Schestakow con su rostro desfigurado, hinchado, lleno de moretones, muy dolorido y sin los dientes de arriba. Además, un estudio confirmó que tiene fractura en la parte frontal del cráneo y peligra la visión de un ojo. En esta situación está desde el domingo a la madrugada cuando, según denunció, lo golpearon brutalmente tres policías.
La agresión ocurrió alrededor de las 5.30 en la vereda de Comandante Torres 350, donde ahora vive solo pero que antes lo hacía con su novia.
Según su relato, el sábado a la noche, tras salir de su trabajo como cocinero, concurrió con su pareja a un bar, allí discutieron, él volvió solo, posteriormente arribó ella acompañada de su padre.
Lucas discutió con su suegro, “me dijo que iba a llamar a la policía, él trabaja en una estación de servicio donde carga combustible la policía, yo me empiezo a pelear con él, saca algo, no se si fue un cuchillo, caen dos móviles, pensaba que se iban a meter para defenderme, pero comienzan a pegarme ellos también”.
Dijo que no los conoce pero los describió como policías jóvenes que puede identificarlos porque se acuerda de sus rostros. “El que más me pegó se reía cuando se iba porque le dije que me acordaba de su cara”.
Cree que le pegaron no sólo con los puños, sino también patadas y “sentía golpes como de palos”.
Además, “mi novia vio cómo me hacían todo esto y no hizo nada. Los policías me dejaron tirado en el lugar, después me fui hasta la casa de mi mamá a dos cuadras y de ahí me trajo la ambulancia. No me alcancé a desmayar pero hay partes que no me acuerdo”.
Pagliarulo, cuyo caso fue denunciado por familiares en la Comisaría Octava, aseguró no tener problemas con la fuerza de seguridad, “inclusive mi hermano es policía” y añadió que “yo trabajo, tengo dos hijos de 4 y 8 años y no me considero una mala persona para que me pase esto, más allá de que como todas las personas puede tener problemas”, manifestó entre lágrimas sentado en la cama del hospital.
Investiga la Inspección de Seguridad
El comisario Carlos Mugneco, jefe de la Distrital Dos confirmó que el caso ya está en manos de la justicia local y en la Inspección General de Seguridad, el ente que investiga la conducta de los uniformados, y que se indagará en las comunicaciones y los registros del CEO Sur para determinar cómo fue la situación. También confirmó que hay denuncias de la novia y el suegro contra Pagliarulo.
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